La mire otra vez de costado y pensé
Benditos sean los laureles que llueven contra su cara, o la de alguien mas quizás,
y poner un paraguas en su mano, cuando no hay nada nuevo que le haga sombra al sol.
Y que mas da?,
amigo del espejo, que mas da?
Ellas caminan agraciadas dando brincos
En la rivera contraria de un río de aguas negras
Y mientras aquí nosotros masturbando las paredes
y sonriéndole a las motas de polvo.
lunes, 27 de abril de 2009
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4 comentarios:
"sonriéndole a las motas de polvo"
Te lo digo de nuevo, me gusto.
Mujeres.
... las mujeres :(
what?
?
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